La Universidad De La Salle y los Derechos Humanos

Dedicar un número completo de la Revista REDpensar al tema de los derechos humanos habla de la importancia que la Universidad De La Salle da a este tema en el que nos jugamos de una u otra manera el futuro.

La misión final de cualquier Universidad está relacionada con el servicio que ofrece a la sociedad, pero la misión de una universidad inspirada desde la ética, le da a esa misión un carácter transformador.

 La ULaSalle tiene como una opción fundamental poner a la ética en el corazón de la labor universitaria y eso nos lleva a optar porque la comunidad universitaria vivencia y promueva los derechos humanos. Por eso, desde el año 2011 logramos que Unesco nos aprobara la Cátedra Unesco de Derechos Humanos. Desde ella nos dedicamos al estudio y la investigación para analizar y denunciar las estructuras injustas y proponer alternativas para la sociedad costarricense y centroamericana. Y es que creemos con Eduardo Galeano que “los derechos humanos no se mendigan. Se exigen”.

La ética y los derechos humanos son fundamentales en los procesos de formación que impulsamos pues son clave para salir de un mundo donde: 

[…] las injusticias se multiplican, las desigualdades se agravan, la ignorancia crece, la miseria se expande. La misma esquizofrénica humanidad capaz de enviar instrumentos a un planeta para estudiar la composición de sus rocas, asiste indiferente a la muerte de millones de personas a causa del hambre. Se llega más fácilmente a Marte que a nuestro propio semejante. (José Saramago)

Despertar la conciencia de los derechos humanos es una de nuestras prioridades pues nos hace recuperar nuestra misión fundacional al servicio de las y los empobrecidos. Y este despertar queremos hacerlo desde una academia comprometida con las grandes causas, desde acciones y estudios serios y contundentes, que lleven incluidas propuestas porque creemos que “sólo se permite criticar a quien propone soluciones”.

Ignacio Ellacuría, refiriéndose a las posibilidades de una universidad distinta, en la línea de una universidad inmersa en una conciencia liberadora, afirmaba en un artículo que: 

[…] el sentido último de una universidad y lo que es en su realidad total debe mensurarse desde el criterio de su incidencia en la realidad histórica, en la que se da y a la que sirve. Debe mensurarse, por tanto, desde un criterio político.  

Por ello hemos “parcializado” la Universidad a favor de los derechos humanos, a favor de prácticas que nos ayuden a vivenciarlos y a promoverlos. Por eso apostamos por la formación de profesionales comprometidos con la realidad, sensibles ante el sufrimiento de los más necesitados y solidarios con los que sufren.

Queremos formar profesionales que crean, como dice José Saramago, que la Justicia debe estar protegida por la libertad y el derecho. Y que la Declaración Universal de los Derechos Humanos debe posibilitar la realización plena de Justicia.”

Esta revista da cuenta de nuestra opción por los derechos humanos y, por eso parafraseando a Eduardo Galeano, está escrita para quienes no pueden leerla: Los de abajo, los que esperan desde hace siglos en la cola de la historia, porque no saben leer o no tienen con qué. 

Por Oscar Azmitia, fsc.

Publicado: 2018-06-22